La isla de Bastoey, en Noruega alberga una prisión de mínima
seguridad en la que los reclusos van a trabajar, entran y salen libremente de
sus habitaciones y van a la playa.
En la cárcel no hay guardias de seguridad y tiene una tasa de reincidencia de
16%, la más baja de Europa y posiblemente del mundo.
Conozca la prisión en este video de BBC Mundo.
Fuente: bbc.co.uk
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